Hija de Don Héctor G. y licenciada en Psicología, Patricia Gilligan explica el valor de la práctica de los Doce Pasos y su efecto decisivo para la recuperación de las adicciones.
El 5 de Marzo pasado se cumplieron 30 años de la muerte de Don Héctor G., cofundador de Alcohólicos Anónimos en Argentina. Además de ser mi padre fue un gran hombre. Hace 26 años, también en marzo, me recibí de Licenciada en Psicología en la Universidad de Buenos Aires. Mi deseo siempre fue trabajar en relación a lo que vivía junto a mis padres: acompañar a las personas y las familias a tener una vida mejor y elegí la Psicología como vehículo.
Agradezco y admiro profundamente los grupos de Doce Pasos, cualquiera sea la adicción que aborden. Para los profesionales es de gran ayuda porque facilitan nuestro trabajo.
En el sanatorio había leído bastante literatura de AA, incluso el "libro grande" de AA, que incluye todos los conceptos espirituales que conforman el programa de rehabilitación de Alcohólicos Anónimos, además de las historias personales de algunos de sus fundadores en Estados Unidos. El libro me había parecido interesante pero no llegué a captar en aquella primera lectura todo el valor de su contenido." Por Héctor G., cofundador de Alcohólicos Anónimos en Argentina. Del folleto "Los comienzos de Alcohólicos Anónimos en la República Argentina".