¿Para qué necesita apadrinamiento un país con nuestra trayectoria? Compartiendo en reuniones y foros en nuestro país y de países vecinos, vimos que sí habíamos tenido algunos países como ahijados. Ejemplos: Uruguay, Paraguay.
No habíamos sido apadrinados, no habíamos tenido ninguna estructura de A.A. mundial como padrino en nuestra historia. Don Héctor G, nuestro cofundador en Argentina, recibió guía y apoyo de la O.S.G. (Oficina de Servicios Generales) de Nueva York a través de la compañera Ann M., alcohólica, miembro del Despacho Internacional de Nueva York y aunque él la consideró su madrina en lo personal, tampoco E.E.U.U. y Canadá fueron nuestros padrinos en sí. Don Héctor incluso relata que muchas veces pensó que A.A. slo funcionaria para la mentalidad sajona y no para nosotros. Esto, a lo largo del tiempo, aún cuando consolidamos una estructura, fue un pensamiento que estuvo latente a la hora de aplicar principios básicos de funcionamiento en nuestra estructura. El no habernos apadrinado nunca tal vez nos privaba del beneficio de la humildad tan necesaria a la hora de crecer espiritualmente en A.A. para formar una estructura basada no en el mero esfuerzo de las ganas o del idealismo pero sí en el amoroso camino de la guía de los principios que Dios había dado a A.A. como un todo. Uno de ellos: el padrinazgo.
El padrino Mario B., Delegado Mundial en el periodo 2013-2017 fue quien se informó más sobre el apadrinamiento de país a país. La conferencia de nuestro país vio también esta necesidad y aprobó unánimemente que la Junta de Custodios eligiera entre Brasil, Colombia y México para ser nuestros padrinos. Observé y escuché a mis compañeros en el debate de este punto. Vi la comunidad y si bien algunos podían decir que las estructuras ya formadas no se apadrinan, el mensaje de AA mundial fue otro:
“Todos los AA, no importa el tiempo que llevemos sobrios, nos podemos beneficiar con el padrinazgo e incluso la experiencia de haber tenido padrino nos prepara para apoyar a futuros ahijados de una forma más efectiva.”
Argentina tal vez no pudo llevar adelante la tarea de padrino de otros países de forma más efectiva y esto lo comprobé en las reuniones que tuve en Uruguay y Paraguay, países a los cuales debemos agradecer que siempre reconocieron el apoyo de padrinazgo brindado y nunca sentí un reclamo formal pero nuestro padrinazgo pudiese haber sido mejor.
Fue nuestro propio inventario como estructura la que devino en darnos cuenta que sí necesitábamos padrinos. Recuerdo que Mario B., en una Conferencia, me regaló una frase muy importante para mí. Dijo algo como esto: “Si tenemos padrinos debemos estar dispuestos a dejarnos guiar por los padrinos”. De allí que debo decir en mi experiencia que si alguna vez no logré todos los beneficios de mis padrinos fue porque no siempre he estado dispuesto a ser apadrinado, que el verdadero logro en gran medida del beneficio en el padrinazgo es qué tan dispuesto esté el ahijado a dejarse guiar. Como país también se vio esto y con esta inquietud viajé a la 20ª REDELA (Reunión de las Américas) en Costa Rica. Nuestra Junta también me transmitió la propuesta que podríamos apadrinarnos con E.E.U.U. y Canadá.
“¿Porqué elegimos México? ¿No tienen ellos suficientes problemas?”
En Costa Rica hablé con los delegados mundiales de E.E.U.U. y Canadá, con Brasil, con México y con Colombia. Estas conversaciones las llevé adelante con mi mayor esmero en servir con la responsabilidad delegada por ustedes tratando no verter opiniones personales ni inclinarme personalmente por alguna estructura u otra. Escuché la experiencia de E.E.U.U. y Canadá -quienes habían apadrinado a muchos países- sugerir que buscar un país de la misma lengua para apadrinamiento, a veces, es más efectivo. Ellos son padrinos de México.
Los países consultados, sabiamente, me guiaron diciendo que éramos nosotros quienes debíamos decidir y luego ver si el país elegido podía apadrinarnos. Volví con toda esta información a la Junta de Custodios ya que los Custodios informan, en primera instancia, a la Junta de Servicios Generales (J.S.G.) y de la consciencia de grupo de esta Junta salen las informaciones que se envían a la comunidad (esto es para preservar nuestras Tradiciones y Garantías). En la J.S.G. vimos que al ser México la segunda estructura mundial sólida y con un amplio crecer en el trabajo de Servicio, podía ser la indicada. También observamos que hubieron -y tal vez hayan- dolores de crecimiento en esta estructura. Esa misma experiencia podía ser vital pues en A.A. se aprende de las dificultades y estas enseñan más nuestros errores que nuestros aciertos.
Veamos aquí algunos datos de nuestros padrinos de Central Mexicana de Servicios Generales de AlcohólicosAnónimos AC:
El 9 de diciembre de 1969, durante la 2ª Asamblea Mexicana de Servicios Generales (hoy Conferencia Mexicana), se decidió crear la Oficina de Servicios Generales (O.S.G.), dada la necesidad de brindar servicios a los 213 grupos entonces existentes. Hoy hay aproximadamente 15.000 grupos en todo el país que están inscriptos a la Central Mexicana de Servicios Generales de Alcohólicos Anónimos (C.M.S.G.A.A.) y nada tienen que ver con otros esfuerzos que, en ocasiones, usan el nombre de A.A. en forma ilegal ya que los símbolos y nombres están registrados por la C.M.S.G.A.A. Hubo un crecimiento en los ultimos 50 años del 7.000% desde sus inicios. hay una membrecía aproximada de 122.000 miembros, y el mensaje de A.A. llega a todos los rincones de México con claridad y va más allá de sus fronteras. Dificultades, seguramente también tendrán, pero su estructura es sólida para enfrentarlas.
En la XIII Rédela recomendó la conformación del Comité Internacional en todos los países de América. El Comité de Apadrinamiento a países fue sustituído por este Comité Internacional, por acuerdo de la Junta de Custodios en su Reunión Trimestral de noviembre de 2003.
E.E.U.U. y Canadá apadrinan a México y también fue siempre referencia para el funcionamiento de la estructura de Brasil. México apadrinó entre otros a Colombia y Brasil apadrina a Paraguay hoy en dia.
Luego de evaluar ésta y otras informaciones, la Junta decide que tal vez México sea el posible padrino. Para convalidar esto, invita a nuestra 55ª Conferencia de Servicios Generales a Brasil, Colombia, E.E.U.U. y Canadá, México, y también a los países limítrofes. Les brindamos temas y realizamos un compartir el día viernes Pre Conferencia para que todos pudieran escuchar a los delegados mundiales de las estructuras que podríamos decidir que nos apadrinen. Efectivamente, en consenso unánime de la Junta de Custodios, se propone al plenario de la 55ª CSG que México sea nuestro padrino. El plenario vota unánimemente por la afirmativa.
“¿Cómo pueden las experiencias de otro país ser útiles a nuestra comunidad?
La experiencia de un alcohólico a otro es fundamental para llevar el mensaje de recuperación, al igual que de un país a otro país. La experiencia, tanto en los aciertos pero aún más en los errores, es valiosa para el crecimiento aliviando aquellos dolores que ya padecieron otras estructuras sólo si sabemos escuchar libres del racionalizador pensamiento de que “somos diferentes”.
"¿Y ahora tenemos que hacer lo que México nos dice?”
Desde el principio de nuestro apadrinamiento nuestro padrino sólo nos responde ante los pedidos o consultas que nosotros hacemos y no nos dice qué debemos hacer, sólo nos muestra el camino en la práctica de los principios y guías como El Manual De Servicio Mundial y el folleto "El grupo de A.A., donde todo empieza" y cómo han dado resultado en otras estructuras iguales o incluso más pequeñas que nosotros para fortalecer la transmisión del mensaje a través de una estructura sólida.
Somos nosotros quienes decidimos llevar adelante estas sugerencias y estas guías en base a lo vivido ayer y fortificando lo que hoy tenemos. Una visión de liderazgo vital, una visión de “principios antes que personalidades”, una estructura sólida pero a la vez con la humildad suficiente para aceptar errores y aprender de ellos dejándose guiar por unos padrinos amables y con principios firmes en A.A. -entregados de lleno a un Dios amoroso, como nosotros lo concebimos- y siempre, agradecidos y atentos a su voluntad en pos del que sufre para ayudarnos a nosotros mismos en el espíritu de amor y servicio que es A.A., es el fruto que hoy la comunidad toda vive. Y lo veo en cada reunión que comparto con los líderes de A.A. Y éstos, son todos aquellos que con su ejemplo construyen, cada 24 horas, un refugio seguro para estar en paz sirviendo al que hace en realidad la obra, Dios, el Poder Superior, como cada uno lo conciba.
Así sea para nosotros y para los que vendrán… ¡Felices 24 horas!
Alberto C., Custodio General y Delegado Mundial de 2º Término por Argentina.
“Todos los A.A., no importa el tiempo que llevemos sobrios, nos podemos beneficiar con el padrinazgo e incluso la experiencia de haber tenido padrino nos prepara para apoyar a futuros ahijados de una forma más efectiva.”
